¿Cuántas estábais esperando la llegada del verano para poder disfrutar de la playa o la piscina, de los amigos y de esos buenos ratos de ocio junto a ellos?
Tanto si estáis disfrutando ya de unas más que merecidas vacaciones como si estáis ya en la recta final para empezarlas, lo cierto es que durante estas semanas todos tendemos más a cometer ciertos excesos que, aunque necesarios y bien ganados después de todo el año, no siempre son saludables o beneficiosos para nuestra salud.
No obstante, y entre nosotras, ¿no nos merecemos poder darnos algunos caprichos cuando nos apetezca este verano y sin remordimiento alguno?
Para ayudar a esto último, desde el punto de vista de nuestra salud y para evitar sentirnos un poquito mal al día siguiente, os hemos preparado una serie de consejos que nos ayudarán a mantener un buen balance este verano entre esos pequeños excesos y unos hábitos saludables.
¡Seguid leyendo para conocer los mejores consejos para disfrutar del verano de la mejor manera!
La alimentación como base de un verano saludable
Si queremos disfrutar de un verano en el que podamos cometer algunos excesos y no sentir que nuestro cuerpo se resiente es importante tener en cuenta que la alimentación que sigamos este verano va a jugar un papel muy importante.
Por suerte, los meses de verano tenemos la suerte de contar con maravillosas frutas y verduras de temporada que, además, por su alta composición en agua, nos van a ayudar a mantenernos bien hidratadas, algo especialmente importante si estamos embarazadas.
Como consejo general, es importante evitar también los excesos desmedidos, las grandes ingestas de comida, los típicos atracones, que en verano siempre sientan peor y hacen que nuestra digestión sea mucho más lenta y pesada lo que, junto al calor, puede llegar a ser realmente incómodo.
Así pues, en relación con nuestra alimentación, os recomendamos seguir las siguientes pautas regularmente:
- Hidratación: debemos beber una cantidad de agua entre 2 y 3 litros. Es recomendable, además, cuando sabemos que vamos a estar más expuestos al sol, por ejemplo, en la playa o la piscina, además de la crema de sol, que no falte una botella de agua fresca en vuestra bolsa para beber mientras disfrutamos del sol. Tampoco está de más llevar alguna pieza de fruta rica en agua como sandía o melón.
- Frutas y verduras: ambos grupos de alimentos deben ser la base de nuestra alimentación durante el verano. Además, durante estos meses encontramos muchas variedades de todos ellos que, seguro que podemos combinar en nuestros desayunos, postres o platos principales del día. Sea como sea. Las frutas y verduras nos aportan hidratación y todos los nutrientes que nuestro organismo necesita para funcionar de la mejor manera frente a la fatiga que provoca el calor.
- Evitar alimentos ricos en azúcar o grasas: aunque siempre es un poquito más difícil, debemos intentar evitar a mantener a raya los alimentos ultraprocesados, los fritos, los alimentos grasos y aquellos con un contenido excesivo de azúcar. También beber alcohol con moderación ya que, entre otras cosas, tiene un elevado contenido en azúcar.
El ejercicio moderado, el complemento ideal para este verano
De igual forma que hemos visto que una buena alimentación es importante durante el verano para ayudar a nuestro organismo a que funcione al 100%, practicar cierto ejercicio nos va a ayudar a sentirnos mucho mejor, especialmente el día después de largas y copiosas comidas o cenas con los amigos.
En realidad, es suficiente con practicar unos 30 minutos de ejercicio moderado 3 o 4 veces por semana para contribuir a sentirnos bien. Eso sí, recordad que nunca debemos hacer ejercicio en las horas de máxima exposición solar o las horas en las que más aprieta el calor ya que podría jugarnos una mala pasada.
Nuestra recomendación siempre es intentar hacer deporte al aire libre, bien a primera hora de la mañana o cuando ya haya caído el sol.
A continuación, estos son los deportes que nos parecen más recomendables y que creemos que están al alcance de la mayoría de nosotros.
- Natación: si sois de los que en verano os gusta disfrutar de la playa o la piscina, no hay excusa para no nadar un rato cada día. La natación, además, es un deporte de muy bajo impacto para nuestro cuerpo y muy recomendable para las embarazadas ya que os ayudará a tonificar los músculos y a estar mucho mejor preparadas para el parto.
- Pasear o montar en bicicleta: pasear o ir en bici durante 30 minutos varias veces por semana es muy recomendable y nos va a ayudar a encontrarnos mucho mejor. Además, si se da la circunstancia de que estamos unos días fuera de casa, tenemos la excusa perfecta para salir a descubrir nuevos lugares. Eso sí, para pasear 30 minutos al día, no hace falta esperar a que llegue el verano. Desde AISH os recomendamos hacer esto durante todo el año para mejorar cuidar de nuestra salud.
- Deportes de equipo: de una manera relajada, practicar deportes en equipos en verano es una manera de disfrutar junto a la familia y amigos mientras nos ponemos en movimiento. Pádel, tenis, volley playa… con cuidado para evitar lesiones, es una buena manera de disfrutar del verano y cuidar de nuestra salud.
No debéis olvidar, si estáis embarazadas, que la práctica de ejercicio debe estar siempre supeditada a lo que diga vuestro ginecólogo. Él os debe dar las mejores pautas y recomendaciones en función de cómo se esté desarrollando vuestro embarazo.
Eso sí, en vuestro caso, es mejor dejar de lado algunos deportes y optar por pasear, nadar, optar por el yoga, por ejemplo, y lo más importante….¡dejar que os cuiden mucho este verano para disfrutarlo al 100%!
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